Un tema 
bastante interesante, ¿verdad? Alguna gente considera a ciertos animales
 como sagrados, incluso, por encima de ellos mismos. Otros consideran a 
los animales como una herramienta financiera. Muchas veces, los animales
 son torturados, abusados, algunos de ellos inclusive, pueden enloquecer
 como producto de la crueldad que tienen que soportar. Otras personas 
consideran a los animales como una molestia, como algo a lo que pueden 
disparar armas de fuego y matarlos. Mientras que otras personas ven a 
los animales simplemente como alimento y toman solamente lo que 
necesitan para su subsistencia. 
Pero luego, hay aquellas 
personas que colman con gran amor a sus animales escogidos. Estas 
personas los alimentan, los nutren e inclusive, los miman, emocional y 
amorosamente, y tratan a sus animales como si fueran sus propios hijos. 
Un gran contraste de actitudes entre los hombres y mujeres de vuestro 
Planeta, ¿no es cierto? Comprendan que, en la misma medida en la que 
existe el reino hominal, también existe el reino animal. Los animales 
sirven al reino hominal, al igual que lo hacen el reino mineral y el 
reino vegetal.
Hay algunos animales que ingresan a la 
cadena alimenticia de la humanidad. Ellos (estos animales) vienen a 
encarnar a la Tierra sabiendo esto con antelación. ¿Acaso ustedes 
piensan que un pajarito, una vaca o un ciervo, entre otros, no tienen 
conciencia, acaso creen que no tienen sentimientos? Ustedes juzgan que 
esto es así porque ellos no se comunican de la forma que ustedes lo 
hacen, vale decir, hablando un lenguaje. Sí, comprendan que ellos son 
capaces de llorar por susto, por temor o, cuando están en dolor. Ellos, 
al igual que ustedes, tienen carne, sangre, huesos y nervios, 
exactamente, al igual que ustedes. Ellos también tienen una forma de 
inteligencia. Aunque ella no está al nivel humano, sin embargo, esta 
inteligencia sí existe en los animales. De verdad, les puedo asegurar a 
ustedes que ellos sienten dolor, tanto emocional como físicamente.
Éste
 es el tiempo para que la humanidad cambie su actitud hacia el reino 
animal, desde una posición de arrogancia hacia una de compasión. Todos 
los seres de la Naturaleza sirven en los ciclos de la vida, de la 
existencia.
Por ejemplo, miremos a aquellos animales que 
llegan a ustedes como vuestra mascota, a menudo, se trata de un animal 
escogido o elegido por ustedes. En tanto y cuanto hay muchas especies, 
yo les hablaré de animales como el perro o el gato doméstico. Muchos de 
ellos vienen a vuestras vidas para curarlos en algún nivel. 
Generalmente, en estos casos, se trata de una cura emocional. Ustedes 
les proveerán alimento, techo, vale decir, un refugio seguro. En 
retorno, ustedes reciben de parte de estos animalitos, amor 
incondicional y lealtad. Muchos de ustedes buscan encontrar estas 
cualidades en una relación humana, y no las pueden hallar. Por ello, 
tienden a dar mucho amor y afecto a su mascota; a menudo, esta mascota 
está contenta al darse cuenta que están con ustedes compartiendo la 
misma habitación. Muchos de ustedes hacen de su mascota su confidente, e
 incluso, muchas veces, les cuentan sus problemas, sus preocupaciones, 
sus sentimientos. Ustedes pueden percibir que sus mascotas los miran a 
ustedes con una mirada muy profunda, puesto que, en ese momento, el 
animal entiende vuestras emociones, vuestros sentimientos.
A
 menudo, si están sentados, vuestro perro se parará o caminará hacia 
ustedes, y, si es el caso, apoyará su cabeza sobre vuestras piernas. Ese
 gesto del animal es equivalente a un abrazo humano. Los animales se 
comunican con los humanos a diferentes niveles.
El nivel de comprensión de ellos es más grande de lo que ustedes creen. Los ojos de una persona son la puerta de ingreso a vuestra alma. Ese mismo hecho es el que sucede en el caso de un animal. Aquellos de ustedes que escuchan a vuestras almas, con seguridad comprenderán lo que les estoy diciendo.
A
 menudo, es dificultoso para ustedes, el amarlos, el darles vuestro amor
 incondicional, mientras que un animal, sí lo puede. De hecho, muchos 
perros domésticos lo hacen. Ellos han aprendido que la compañía humana 
es todo lo que les interesa. En esa relación con ustedes, esto es para 
ellos, amor, es paz, es confianza. Ellos se convierten en seres que 
consagran su devoción hacia ustedes, con el componente básico de la 
lealtad.
¿Cuántos de ustedes que experimentan una relación
 cercana con otra persona, podrían decir lo mismo, respecto a la 
devoción o la lealtad que esa persona tiene hacia ustedes? ¿Cuántos de 
ustedes podrían decir que aman incondicionalmente? En este momento, 
piensen en ello. Con la palabra “ello” quiero decir, el aceptar los 
varios patrones de conducta de las otras personas, sean estos buenos o 
malos.
¿Pueden ustedes aceptar realmente estos diferentes 
patrones de conducta de las otras personas, sin hacer mayor problema, 
sin molestarse, sin juzgarlos? ¿Pueden ustedes expresar hacia sus 
semejantes, un verdadero amor incondicional? Sepan que un perro, sí 
puede. Y, sin embargo, ustedes creen que los animales tienen un nivel de
 inteligencia inferior al de ustedes. Observen que algunas veces, un 
animal puede ser vuestro profesor, vuestro maestro. Incluso, cuando 
ustedes están enojados, vuestro perro reacciona con serenidad, y se 
sienta esperando el tiempo que sea necesario, hasta que percibe que 
vuestra rabia, que vuestra molestia se han disipado, antes de intentar 
ingresar de nuevo a vuestro campo energético. Aparentemente, este animal
 hace eso sin mayor juicio. 
Hay algunos perros y gatos 
que llegan a la vida de las personas, porque ellos ya han compartido 
previamente, una vida con ellos. Para una verdadera comprensión de esta 
afirmación, por supuesto, la persona tiene que creer con la mayor 
convicción, en la llamada reencarnación. En esa situación, es posible 
que, en esa vida previa, no haya podido completarse un propósito 
establecido para la misma. Entonces, ellos retornan a esta vida actual, 
precisamente, para completar o experimentar, algo que estaba faltando y 
que no pudo ser cumplido anteriormente.
Exactamente, 
al igual que dos almas humanas pueden reconocerse, una a la otra, de la 
misma forma un alma animal y un alma humana pueden reconocerse entre 
ellas. En esa situación, ustedes sienten un reconocimiento inmediato, 
perciben un sentimiento conciencial de conocer a la otra alma.
Sintiéndose
 muy cómodos entre un alma animal y un alma humana, estos animales 
encarnan en la Tierra con un propósito. A propósito, hay un dicho de un 
“canalizador” que en este instante viene a mi mente: “Ofrécele una casa a un animal vagabundo y callejero, y él, muy pronto, te pagará de vuelta con la bondad”.
 ¿Y después de eso, continúan diciendo que en un animal no hay 
inteligencia? Yo les digo a ustedes, piensen nuevamente acerca de estos 
sus preconceptos equivocados, quédense tranquilos y simplemente 
observen.
En ese escenario, se me ha consultado si un 
animal asciende. ¿A qué llaman ustedes ascender? ¿Qué es lo que ustedes 
creen que sucede con un animal que asciende? Justamente, al igual que en
 las experiencias humanas de una vida después de otra, en la que el alma
 humana experimenta un aprendizaje, de la misma manera, un animal 
doméstico atraviesa el mismo tipo de experiencia, aunque ésta acontece a
 su nivel de evolución en el que se encuentra. Digo “animal doméstico” 
por una razón, puesto que a diferencia de otros tipos de animales, éstos
 llevan consigo una vibración más alta que los animales salvajes. 
Consiguientemente, en la medida en que su vibración se eleva, ellos 
traen consigo más luz, más amor, y, por ende, ellos recorren un sendero 
más elevado hacia la ascensión. Con ello, los animales domésticos sirven
 a la humanidad y a Dios, exactamente como lo hacen los seres humanos.
Ustedes
 vean mis amigos y piensen que la ascensión está en el aprendizaje, en 
el estudio, en asimilar experiencias durante este tránsito por esta 
escuela de aprendizaje llamada Tierra. Ésta es la comprensión y el 
entendimiento humanos, ésta es la expresión humana. Comprendan que la 
ascensión no podrá ser lograda hasta que ustedes verdaderamente la 
sientan en su corazón, con un amor incondicional, sin juzgar a los 
demás, sin infligir daño alguno a otro ser vivo, ya sea verbalmente o 
físicamente. ¿Ustedes ven estos aspectos referidos a la ascensión? 
¿Comprenden ahora los muchos niveles que existen en el sendero de la 
ascensión?
A menudo, los lazos de unión entre un ser 
humano y su mascota, se tornan muy fuertes. Ambos sienten eso y ambos 
responden con amor y ternura, con afectuosidad. En muchos de los casos, 
el animal se convierte en parte de la familia. Exactamente, tal como 
ustedes requieren una sanación o una cura universal, sus mascotas 
también lo precisan. A propósito, los gatos y los perros son muy 
intuitivos, al igual que los caballos. Ellos responden fuertemente a los
 varios campos energéticos de otros. Igualmente, ellos a menudo absorben
 las energías negativas, particularmente, de sus acompañantes humanos.
Yo
 no deseo utilizar la palabra “propietario” o “dueño” de una mascota, 
puesto que nadie puede ser “propietario” o “dueño” de otra alma. La 
energía de sanación universal es de gran beneficio, puesto que ella 
limpia y sana el campo áurico de un animal, así como su cuerpo físico, 
exactamente, tal como esta energía opera en vuestro caso. Dicha energía 
prolonga la vida y restaura la armonía en cada nivel.
¿Sabían
 ustedes que estos animales domésticos también residen en dimensiones 
más altas, una vez que ellos cruzan las barreras de esta dimensión en la
 que vive la Tierra? Precisamente, por ello, las almas de estos animales
 que ya han evolucionado hacia dimensiones superiores, pueden 
manifestarse a través de un “médium” para expresar entre otros, su 
reconocimiento a la familia humana con la que convivieron durante su 
experiencia de vida en la Tierra, a la cual le manifiestan su profundo 
amor y agradecimiento, de la misma manera que ustedes hacen cuando 
cruzan las barreras de esta dimensión. Todos estos animales domésticos 
vienen a la Tierra con mucho amor, y, en esa dimensión superior a la que
 se han elevado, no puede existir un atisbo de negatividad de ninguna 
clase.
En la medida en que ustedes eleven sus vibraciones,
 serán capaces de comunicarse con las dimensiones superiores, e incluso,
 muchos de ustedes, al elevar sus vibraciones, podrán comunicarse 
telepáticamente con sus mascotas. En consecuencia, muy próximamente, se 
estarán abriendo para ustedes, otros niveles de comunicación con las 
dimensiones superiores.
Permanezcan con la mente y el corazón abiertos, con todo vuestro amor.
Maestro Kuthumi